Según recientes estudios del Banco Mundial, el BID y la CEPAL:
- Constituyen más del 90% de las empresas en América Latina.
- Generan el 63% del empleo.
- Participan con el 40% del PBI de la región.
Están en todos los sectores de la economía, desde el comercio y la industria, hasta los servicios, la salud y el sistema financiero, y según las estadísticas del Banco Mundial son el soporte del tejido social de todo el continente.
Sin embargo las PYMES, padecen diversos problemas que les restan eficiencia, productividad y competitividad.
Informalidad.
Afecta al 50% de las Pymes y microempresas y les cierran las posibilidad de acceder a créditos, programas de ayuda de organismos oficiales y posibilidades de exportación.
La experiencia parece indicar que el problema está vinculado a la ausencia de una “cultura empresaria” en sus gestores (las pymes nacen de una necesidad de muchos emprendedores y NO de una decisión pensada).
Atraso tecnológico.
Las pymes invierten poco en tecnología, y cuando lo hacen, compran tecnología inadecuada.
¿Por qué? “Porqué para modernizarse primero hay que enfocarse en el eje del negocio y después sí pensar en la tecnología” ya he hablado del ENFOQUE Y LA TECNOLOGÍA y a ello me refiero.
Un reciente estudio Fundes, muestra que las pymes solo invierten el 2 % de sus presupuestos en tecnología.
¿Por qué? Porque el empresario pyme piensa en la tecnología como un gasto y no como INVERSIÓN.
Ausencia de capital humano.
Si bien hoy el paradigma es la especialización, la formación y la actualización permanente del capital humano, las pymes están fuera.
No hay planes de carrera, no existen procesos de selección apropiados conforme a habilidades, destrezas, aptitudes y conocimientos de los aspirantes.
Ignorancia vendedora.
Las pymes saben producir, pero no saben vender. Consideran el marketing como un gasto y no como una INVERSIÓN, y por tanto su base de clientes difícilmente crece, ni se crean nuevas ofertas de bienes y servicios, aunque exista un gran potencial en el mercado.
En definitiva “el cliente es el que hace rentable un negocio, no el producto". Esta afirmación significa que las empresas dependen de los mercados y la forma como estos reaccionan ante sus propuestas de productos o servicios”
Crédito cero.
Es típico de las pymes, que por la informalidad, el desorden administrativo que presentan, la falta de liderazgo, la ausencia de garantías reales y la carencia de información, no puedan acceder al crédito.
“la primera condición que todo microempresario debe contemplar es tener transparencia en el suministro de la información y mantener una contabilidad organizada”
La razón es sencilla: al tener mayores niveles de riesgo, los bancos les cobran más y les reducen el tiempo de financiación, lo que en muchas ocasiones las excluye del mercado financiero tradicional
¿Y el futuro?
Las pymes deben trabajar mucho en el tema de la innovación y en aspectos como la asociatividad para poder competir internacionalmente; y en la creación de clusters para aumentar la productividad y competitividad.
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